No sólo es un espacio de paso, sino de alimentación y anidación: Cozumel Birding Club.
En el marco del Día Mundial de las Aves Migratorias, la península de Yucatán se distingue como un lugar idóneo para diferentes especies no sólo como su espacio de paso sino de alimentación y anidación, resaltó Itzel Arista Cárdenas, bióloga e integrante del Cozumel Birding Club.
Explicó que esta fecha se celebra dos veces al año, el segundo sábado de mayo y el segundo sábado de octubre, que corresponden con las migraciones de las aves. Fue en Kenia en el año de 2006 cuando nació esta celebración.
Ese año cientos de organizaciones ambientalistas alrededor del mundo se reunieron para crear conciencia sobre las aves migratorias, la necesidad de protegerlas y su importancia en los ecosistemas a nivel mundial.
La bióloga detalló que las aves arriban en verano provenientes de las islas del Caribe y Sudamérica para volar hacia el norte de América y escapar del invierno de la zona sur y anidar en las costas.
La diferencia de ambas fechas, comentó la experta, es que en verano llegan aves para anidar, mientras que en octubre son más coloridas, haciendo mención especial de la especie charrán, que pone sus huevos en las playas, donde incluso ha habido movimientos fuertes de grupos conservacionistas para proteger los huevos de esta ave que desovan en los arenales, lo que supone un riesgo. En Quintana Roo llega en gran cantidad a Isla Mujeres.
Precisó que unas de las aves emblemáticas para la península es el flamenco rosado, la cual hace migración dentro de la zona, así como el loro yucateco, y la paloma cabeza corona blanca, la cual se ve únicamente en Cozumel, Quintana Roo.
Sobre las aves en riesgo, habló del charrán, loro, huitlacoche, flamenco rosado y zopilote rey, los cuales están en la categoría de peligro de extinción.
Asimismo, Arista Cárdenas destacó que el Día Mundial de las Aves Migratorias tiene un tema anual y para esta ocasión es la contaminación lumínica, que invita a usar luces apropiadas para no despistar a las especies.
“Este año es contaminación lumínica; en las ciudades que se han expandido en los últimos años se ha detectado que provocan que se confundan en su viaje, que cambien su rumbo y muchas veces se estrellen contra infraestructuras. Entonces la consigna es dar información y recomendaciones para el uso correcto de las luces”, relató.
Con el conocimiento que se tiene de la avifauna (residente, migratoria y endémica) de la península de Yucatán se analizan datos de distribución puntual y distribuciones potenciales obtenidas mediante modelos de nicho ecológico. Para examinar la similitud entre la avifauna se utiliza un índice de distancia fenética y se estima el número probable de especies que se distribuyen en la región.
El número de registros en la base de datos quedó conformado por la presencia de 436 especies de aves (de 530 estimadas), cinco de las cuales son endémicas de México y se distribuyen en la isla de Cozumel y en la parte norte de la península, donde se encuentran las zonas de mayor aridez, el bosque tropical seco y 17 especies endémicas del resto de la península yucateca.
Reconocen cuatro principales agrupamientos de similitud faunística; uno al norte, otro en el área central, uno más al sur de la península y el cuarto en isla Cozumel. Aunque la mayoría de las especies de aves de la zona son residentes, cerca de 50 por ciento son migratorias invernantes, siendo éste el componente migratorio más importante, junto con las aves transitorias, las cuales constituyen 28.6 por ciento.
Con información de La Jornada Maya.